60
Jonathan Gómez Cantero
unamayor demanda de agua y energía, además
de un aumento de los incendios forestales.
Las olas de calor también seránmás frecuentes
en latitudes más altas, haciendo disminuir aún
más rápidamente los glaciares y las nieves,
favoreciendo la evaporación y pérdida total
de lagos, humedales y todo tipo de láminas de
agua de la superficie terrestre.
Podemos decir que la zona sur de Europa
pasará a tener un clima similar al del norte
de África, y la zona norte de Europa, a tener
un clima como el que ahora tiene el sur de
Europa,
con extremos de calormás acentuados
para ambos casos.
Las noches tropicales
serán más frecuentes y algunas zonas del
norte experimentarán este fenómeno por
primera vez su historia
(
Figuras
44
y
45
)
.
En el caso de las precipitaciones, para
este mismo escenario, tenemos una mayor
sequedad en verano en ambos casos, pero
especialmente en la zona sur, donde todo
apunta a que se van a producir déficits hídricos
muy severos que llevarán a restricciones en el
consumo
(Figuras
46
y
47
)
, o incluso a la falta
de disponibilidad de agua corriente de forma
estacional.
Los inviernos y otoños seguirán siendo los
meses húmedos para la zona sur, pero lloverá
menos cantidad y lo hará de formamás intensa.
Será frecuente que tras largos períodos de
sequía se produzcan
lluvias torrenci
ales en
pocas horas, que harán más frecuentes las
inundaciones
15
.
Figuras
42 y 43:
Se muestra la tendencia de la temperatura para el año 2050 y siguientes
ante el mejor escenario de bajas emisiones y poco aumento (izquierda) o ante el peor es-
cenario que marcan los modelos (derecha). Fuente: Elaboración propia a partir del IPCC.